Inteligencia emocional aplicada a la empresa. Parte 6
Inteligencia emocional aplicada a la empresa. Parte 6

Inteligencia emocional aplicada a la empresa. Parte 6

Hasta ahora se ha mencionado lo que es la inteligencia emocional y su posible aplicación en la empresa. Pero cuáles son las distintas emociones con las que se puede encontrar un directivo emocionalmente inteligente en la empresa. A continuación, mencionaré las diversas emociones que podemos encontrar en la empresa, investigando cuál es su utilidad, su razón de ser y consecuencias.


Alegría


Es la emoción más deseada y la más buscada, pero no debemos olvidar que se trata de una emoción de impulso, de empuje, de fuerza. Una persona que se muestra alegre por todo y durante todo el tiempo, quizás pueda llegar a ser tratada de excéntrica y poco realista. Porque la alegría tiene una función de carácter motivador, de ilusión a la hora de plantear metas y objetivos, de ahí su naturaleza propulsora, es como el acelerador de un coche. 

Es una emoción que el directivo ha de emplear para alcanzar elementos que tengan que ver con la motivación del grupo, con la ilusión del mismo, atender las inquietudes de cada trabajador, mejorar los canales de comunicación, generar autoestima entre los propios trabajadores. En torno a la emoción de la alegría podríamos establecer otra serie de emociones análogas: Alborozo, humor, optimismo, humor, diversión, ilusión, gusto, expectación, deleite… 

El directivo emocionalmente inteligente para fomentar la alegría en la empresa puede: Comunicar los proyectos y objetivos a todos, hacer públicos los buenos resultados, premiar el mérito, trabajar junto con el equipo de trabajo como si de uno más se tratase, fomentar la participación en los canales de comunicación, dar charlas correctoras en privado y practicando la empatía y asertividad.

Felicidad


Como en el caso anterior la felicidad es una emoción muy deseada, todo el mundo desea ser feliz. Pero en este caso se trata de una emoción que se ha de relacionar con la estabilidad, con la meta una vez cumplida, tiene que ver más con una velocidad de crucero estable y no con la aceleración intrínseca de la alegría. Tiene un importante elemento motivador el planteamiento del objetivo de lograr felicidad.

Cuando un directivo se plantea la felicidad en un grupo de trabajo la tendría que plantear desde: la seguridad y higiene en el trabajo, la participación en el trabajo, la realización personal a través de las actividades que se realizan en la empresa, la estabilidad laboral, la promoción en el trabajo, la integración efectiva del trabajador tanto en las estructurar formales como informales de la empresa, la obtención de un sueldo suficiente para mantener sus necesidades y las de su familia. 

El directivo emocionalmente inteligente va procurar establecer estos objetivos en la planificación de la gestión de recursos humanos para que los integrantes del equipo de trabajo logren alcanzar esta estabilidad. Como ocurre con todas las emociones, en torno a la felicidad podemos identificar otra serie de emociones análogas: Plenitud, tranquilidad, satisfacción, bienestar, armonía, equilibrio, serenidad…

Amor


Junto con las dos anteriores podríamos decir que se tratan de las «emociones positivas», es una emoción deseable, entre otras cosas debido a la condición del ser humano como ser social que ha de vivir y desarrollarse en grupo. Y para esto sirve esta emoción para el vínculo, es una emoción que va a permitir que el ser humano pueda llegar a establecer lazos de relación entre otros individuos. Su gestión es de suma importancia en la empresa, ya que gracias a ella se puede llegar a sociabilizar el grupo de trabajo y convertirse en un equipo. 

El directivo que quiera fomentar esta emoción dentro de su grupo de trabajo ha de incidir en el elemento comunicación, en las relaciones personales, en el fortalecimiento de las estructuras formales e informales de la empresa (siempre que no minen a las formales), el agrupamiento según afinidades, talentos, el reconocimiento logros grupales, es una emoción que va a servir de elemento motivador en la empresa. 

El directivo emocionalmente inteligente, sabrá que esta es una emoción de vital importancia para la construcción de un equipo de trabajo cohesionado. En torno al amor podemos encontrar otra serie de emociones: Amabilidad, aceptación, interés, generosidad, autoestima, aceptación, confianza, empatía.

Miedo


Se la suele identificar como una emoción de carácter negativo, pero no podemos olvidar la función que tiene en la evolución del ser humano, pues le ha permitido sobrevivir y adaptarse a los peligros que acechaban al mismo. Pese a que a ningún ser vivo le resulta agradable tener miedo, el miedo empleado con inteligencia emocional se puede convertir en una importantísima herramienta para la supervivencia del grupo de trabajo y de la empresa en si. 

Es una de las emociones más difíciles de manejar por parte del directivo, ya que un mal uso puede generar consecuencias desagradables, por eso es muy importante el entrenamiento y capacitación a la hora de gestionar esta emoción. El directivo emocionalmente inteligente ha de gestionar esta emoción en caso de ataques económicos, financieros y de mercado por parte de la competencia, cambios de entorno interno y externo de la empresa, cambios en  los equipos o procedimiento de trabajo. 

Esta emoción bien gestionada mejora la creatividad, el rendimiento, potencia el esfuerzo, sirve para generar lazos emocionales dentro del grupo. En torno al miedo se puede encontrar emociones tales como: Pavor, pánico, incertidumbre, fobia, vulnerabilidad, desasosiego, recelo, desconfianza…

Tristeza


Es una emoción de difícil comprensión, su utilidad es la de protección ante situaciones adversas y contrarias a la compañía, es una emoción que va a generar una disposición hacia el ahorro de energía emocional, hacia la catarsis del grupo. Ante una situación contraria, el ser humano ha de recomponer y reconfigurar parte de su modo de ver la realidad, es preciso reflexionar, y meditar, para adoptar nuevas estrategias y afrontar la nueva realidad. 

El directivo emocionalmente inteligente, es consciente que el equipo de trabajo y sus integrantes pueden pasar por etapas de tristeza, ha de ser muy cuidadoso en su gestión, dando tiempo a las cosas, pero cuidando también de que no derive en situaciones patológicas, pues puede estar en juego la propia supervivencia del equipo de trabajo y empresa. A este respecto es importante incidir en conceptos como la resiliencia, la aceptación, la reflexión, mejora de los canales de comunicación, incremento del liderazgo. 

La tristeza puede servir para afianzar relaciones dentro del equipo. Afines a la tristeza podemos encontrar: Duelo, nostalgia, resignación, desaliento, pesimismo…

Ira


Es una emoción eminentemente reactiva, es de carácter defensivo, y es extremadamente difícil de gestionar. El directivo emocionalmente inteligente va a gestionar esta emoción para funciones eminentemente defensivas, y siempre con sumo cuidado, pues una mala gestión de la misma puede traer consecuencias completamente contrarias. 

Es una emoción que se ha de utilizar para afianzar la idea de pertenencia al grupo, la asimilación de unos objetivos como propios, la asunción de unas señas de identidad por parte del miembro del equipo de trabajo, puesto que de lo contrario puede llegar a consumir a la empresa en su propio orgullo. 

Por eso es muy importante que la ira se emplee principalmente en una vertiente más defensiva que ofensiva. Afines a la ira podemos encontrar: Orgullo, furia, pundonor, antipatía, indignación, impotencia, rabia…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies